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Jaume |
Published: 2010-04-18 15:03:14 Tuve la suerte de aprender ajedrez desde muy pequeño, ya que mi abuelo me enseñó casi antes de ir a la escuela… Pero hubo dos elementos que hicieron de este juego algo importante para mi y que, en mi vida, ha tenido sus apariciones y desapariciones por distintos motivos, estando, no obstante, siempre presente. El primero fue el jugar en un equipo escolar con el cual empecé a participar en mis primeras lides. El segundo fue un pequeño libro que me regalaron, mi primer libro de ajedrez, y que se titulaba: Las mejores partidas de Rubinstein. Este libro me impresionó sobremanera como ningún otro libro me ha impresionado con posterioridad. Ahí empecé a descubrir el mundo de las aperturas, del medio juego o de los finales… Pero lo que descubrí esencialmente fue una inexplicable sensación de belleza ante las partidas que se recogían de este extraordinario y genial jugador polaco, del que estoy convencido de que si no hubiera sido por la obstaculización económica que Lasker le puso en su momento para disputarle el campeonato del mundo, y por una posterior crisis nerviosa que parece tener su origen en una enfermedad psíquica de tipo esquizofrénico que le impidió mantener el nivel, todo y que siguió jugando y produciendo grandes partidas, reunía todas las cualidades para ser campeón del mundo. En mi opinión Rubinstein junto con Keres y Korchnoi con las campeones sin corona…
Destaca de este jugador su completo equilibrio en todas las fases del juego: depurada técnica posicional, visión táctica, gran finalista (son memorables sus finales de torre). De todos es conocida sus aportaciones a la teoría… Es por toda esta combinación de talentos que hay partidas suyas que alcanzan una extraña belleza, algunas por su belleza en el desarrollo y posterior remate, como la que hoy traigo aquí (Rubinstein – Rotlewi) conocida como “La inmortal de Rubinstein”, o partidas de una belleza apolínea en donde la partida es ejecutada con una precisión y una explotación de los grandes temas de la estrategia ajedrecística, como la otra partida que más adelante ofreceré en estas páginas contra otra de los más fuertes jugadores de su época: el austríaco Schlechter, considerada por muchos jugadores de élite como una de las mejores partidas de la historia y que, como la calificó en su momento Karpov, se trata de una partida aparentemente sin grandes fuegos artificiales y esencialmente de una ejecución brutal…
Como veréis la partida con Rotlewi (Torneo de Lodz, 1907) se fundamenta en la explotación de un error posicional 10. Dd2? Los comentarios que nos ofrecen Schlechter y Tartakower no tienen desperdicio. Que la disfrutéis…
1.d4 d5 2.Nf3 e6 3.e3 c5 4.c4 Nc6 5.Nc3 Nf6 6.dxc5
Tartakower: Menos consistente que 6.a3 or 6.Bd3, manteniendo cuanto más tiempo sea posible la tensión en el centro
Bxc5 7.a3 a6 8.b4 Bd6 9.Bb2 O-O 10.Qd2?
Schlechter: Muy mala casill para la dama. La mejor continuación es 10.cxd5 exd5 11.Be2, seguido de O-O. *** Tartakower: Pérdida de tiempo. La reina pronto tendré que buscar una major casilla (14. De2) La continuación más usual es 10.Qc2
Qe7!
Schlechter: Un sutíl sacrificio de peón. Si 11.cxd5 exd5 12.Nxd5? Nxd5 13.Qxd5 Rd8! Y las negras tienen un fuerte ataque)
11.Bd3
Schlechter: Mejor era 11.cxd5 exd5 12.Be2.
dxc4 12.Bxc4 b5 13.Bd3 Rd8 14.Qe2 Bb7 15.O-O Ne5! 16.Nxe5 Bxe5
Tartakower: Amenazando ganar un peón mediante 17...Bxh2+ 18.Kxh2 Qd6+. El próximo movimiento blanco se protege de esto, pero pierde capacidad de defensa en el flanco rey
17.f4 Bc7 18.e4 Rac8 19.e5 Bb6+ 20.Kh1 Ng4! 21.Be4
Schlechter: No hay defensa; p. e. 21.Bxh7+ Kxh7 22.Qxg4 Rd2 etc.; o 21.h3 Qh4 22.Qxg4 Qxg4 23.hxg4 Rxd3, amenazando ...Rh3 mate y ...Rxc3; or 21.Qxg4 Rxd3 22.Ne2 Rc2 23.Bc1 g6! amenazando...h5; o 21.Ne4 Qh4 22.h3 (si 22.g3 Qxh2+ 23.Qxh2 Nxh2 y ganan.) 22....Rxd3 23.Qxd3 Bxe4 24.Qxe4 Qg3 25.hxg4 Qh4+ mate.
Qh4 22.g3
Schlechter: O 22.h3 Rxc3! 23.Bxc3 Bxe4 24.Qxg4 Qxg4 25.hxg4 Rd3 ganan. *** Tartakower: La alternativa 22.h3,parando el mate, nos lleva a las siguientes y brillantes líneas de juego: 22...Rxc3! (un sacrificio que elimina el caballo que sobreprotege el alfil en e4) 23.Bxc3 (o 23.Qxg4 Rxh3+ 24.Qxh3 Qxh3+ 25.gxh3 Bxe4+ 26.Kh2 Rd2+ 27.Kg3 Rg2+ 28.Kh4 Bd8+ 29.Kh5 Bg6+ mate) 23...Bxe4+ 24.Qxg4 (Si 24.Qxe4 Qg3 25.hxg4 Qh4+ mate) 24...Qxg4 25.hxg4 Rd3 con la doble amenaza de 26...Rh3+ mate y 26....Rxc3, y negras ganan. Como bellas son estas variantes, la continuación de la partida es aun más espléndida)
Rxc3!! 23.gxh4 Rd2!! 24.Qxd2 Bxe4+ 25.Qg2 Rh3! 0-1
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Hugo A. De Simone |
Published: 2010-04-18 16:35:52 Gracias Jaume por tan lindos recuerdos!, todos lo que jugamos al ajedrez, tenemos una "vida de ajedrez". Sin duda Rubinstein eera un gran romántico, creo que tanto el como Tchigorin fundaron por así decirlo, el aledrez ruso. Y comparto que Akiba, Keres y Kortchnoi fueron sin duda campeones sin corona. !Que bella partida! Y los comentaristas eran de lujo! |
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